Visibilizar la diversidad familiar y apoyar a la monomarentalidad

Madrid, 30 oct. 18. AmecoPress-. CaixaForum Madrid acogía esta mañana la jornada “Maternidades Vulnerables”, una iniciativa de UNAF centrada en el compromiso de ayudar a las familias, así como en la necesidad de entender su diversidad. Con la colaboración de FAMS, CNSE y ABD, el acto contó con la participación de personas expertas en la materia, que abordaron una serie de charlas que visibilizaban la necesidad de atención y apoyo a los distintos modelos de familia.

“Son necesarias este tipo de jornadas para hacer ver que ser madre es una decisión”. Bajo este argumento daba comienzo la sesión, inaugurada por Ascensión Iglesias Redondo, presidenta de la Unión de Asociaciones Familiares; e Isabel P. Fuentes, directora del CaixaForum Madrid.

En su inicio, se dio visibilidad a los obstáculos que sufren las mujeres en el contexto de la maternidad. “La elección de ser madre o no es altamente cuestionada en algunos lugares; la maternidad deja de ser una decisión y se convierte en una obligación, como servidumbre que se impone a las mujeres y coarta su libertad”, añadía Iglesias Redondo.

A continuación, se dio paso a una serie de ponencias que especificaban las distintas situaciones en las que se encuentra actualmente la maternidad, abordando los términos de vulnerabilidad, migración familiar o modelos familiares en situación de riesgo.

“Atención pro-elección a la maternidad vulnerable”:

Bajo este título se daba lugar a la primera charla protagonizada por Elvira Méndez, directora general de la Asociación Salud y Familia.

“La misión de Salud y Familia es promover la equidad de acceso a la pluralidad de familias y mujeres, especialmente a aquellas vulnerables al acceso a servicios públicos, sanitarios y jurídicos”.

En su compromiso con el desarrollo humano, social y, sobre todo, en la atención y apoyo a la maternidad en todas sus manifestaciones, Méndez explicaba que “no existe nada parecido al término unidad de estilo en la forma de vivir la maternidad”.

Con esto, la directora apuntaba a la necesidad de llevar a cabo un enfoque pro-elección en el que se establezca la atención a las decisiones libres que toman las mujeres respecto a la continuidad o interrupción de su embarazo, así como a la cobertura de necesidades de aborto, anticoncepción y/o apoyo al embarazo y la maternidad que se derivan.

“Proporcionar la atención necesaria que permite a cada mujer discernir su mejor elección es un buen radical, una ley no escueta que nadie ni nada puede dispensar”, señala.

Por otro lado, Méndez hizo hincapié en la urgencia de aplicar el enfoque equitativo, dando prioridad a los colectivos vulnerables y desfavorecidos de mujeres y madres.

El respeto a la diversidad de mujeres y núcleos familiares obtuvo también gran relevancia. En su discurso, Méndez apuntó al hecho de que la asociación atiende activamente a usuarias de cualquier origen, orientación sexual y capacidad funcional. “No es necesario ningún requisito previo, aquí entra todo”.

Una vez explicada la dedicación profesional por la que se rige la asociación, dieron a conocer los distintos programas que comprende esta línea de trabajo: el programa de Atención a la Maternidad a Riesgo; el de Grupos de Apoyo a Madres entre dos Culturas y, por último, el programa Oportunidades, formado por grupos de Apoyo y Orientación para Madres Adolescentes y Jóvenes.

Todos ellos, comprenden una cartera de servicios y prestaciones en pro de facilitar la atención y apoyo a la diversidad familiar en riesgo y la vulnerabilidad de la maternidad: orientación y acompañamiento durante la crisis que supone un embarazo no deseado, la facilitación de acceso a servicios sanitarios, un servicio de contracepción inmediata de larga duración, así como diversas prestaciones gratuitas como la disponibilidad a test de embarazo o la tramitación de la documentación requerida.

“No tutelamos, no les diseñamos un itinerario de vida. Nuestra función reside en estar ahí para ellas, orientar y ser un espacio de escucha”, advierte.

Tras la presentación de distintos informes y datos que revelaban la continuidad y el progreso social de sus acciones, Méndez incidió en la urgencia de atender a cooperativas institucionales que impulsen una mejora de la situación social de madres y mujeres vulnerables.

“Mediación para madres y padres con hijos adolescentes en situación de riesgo”:

Gregorio Gullón, responsable del Servicio de Mediación para Familias con Hijos e Hijas Adolescentes, coordinó la segunda ponencia dedicada a aquellas familias que presentan dificultades en la relación con sus hijas e hijos.

“Actualmente nos encontramos con nuevas realidades que generan situaciones difíciles en el núcleo familiar, como las de familias migrantes, menores adoptados que en edad de adolescencia presentan dificultades, etc. Todos estos casos requieren una intervención específica”, señalaba Gullón.

Bajo este argumento, explicó que el objetivo de estos servicios consiste en mediar entre progenitores e hijos para que modifiquen su modelo de relación, con el fin de conducir al desbloqueo de sus dificultades y al logro de una convivencia más satisfactoria para todas y todos, incidiendo en la necesidad de encontrar un punto intermedio entre independencia y pertenencia a la familia, "algo muy común en la etapa adolescente”.

Fomentando el diálogo, la escucha no reactiva y la empatía, la mediación va dirigida a aprender a comunicarse de nuevo. “Una buena relación con los y las familiares es el factor más importante”, advierte.

En su discurso, especificó la importancia de atender a situaciones de reagrupación de menores con sus familias migrantes tras años de separación, en las que tanto adolescentes como figuras maternales y paternales se ven desubicados.

“Existe una feminización de la pobreza que desemboca en una feminización de la migración, y en muchas ocasiones la reagrupación se produce en el marco de la monomarentalidad”, explicaba.

Por ello, el servicio de mediación trabaja para solventar este tipo de situaciones familiares, bajo intervenciones que requieren medidas específicas. “Otorgar significado a la separación, restaurar la coherencia narrativa y redefinir la identidad familiar son métodos esenciales”, explica Gullón.

“La familia que existe en la cabeza de las personas es más importante que la que registra el libro de familia. Por lo tanto, nuestra labor es llevar claridad donde hay ambigüedad y confusión”, concluía.

“Experiencias de apoyo y orientación a madres y padres”

En la última ponencia, se dio lugar a tres charlas que contemplaban distintas situaciones específicas de vulnerabilidad maternal.

La primera, bajo el título “Madres sordas: doble vulnerabilidad”, fue encabezada por Laura Hernando Gil, psicóloga técnica del Área de Investigación y Materiales en LSE.

En primer lugar, Hernando Gil denunció que el verdadero disfrute y ejercicio de los derechos de las personas con discapacidad está todavía lejos de conseguir. “Su autonomía e independencia, así como la libertad de tomar sus propias decisiones y el derecho de formar una familia se ven obstaculizados”, apuntaba.

Con ello, explicaba que las madres sordas se enfrentan a una doble vulnerabilidad: barreras de comunicación que desembocan en la desinformación y la dificultad de acceso a servicios y recursos; y, por otra parte, la infravaloración de sus capacidades, obligándolas a trabajos de menor calificación o niveles inferiores de desarrollo educativo.

“Muchas veces, por ser sordas, se encuentran con el prejuicio de que tienen menos capacidades que las mujeres oyentes. Sufren un mayor riesgo de exclusión social y, por tanto, una situación económica desfavorable”, denunciaba.

Además, añadió el hecho de que las mujeres sordas en situación de maternidad se enfrentan a gastos extraordinarios, como son la adquisición de avisadores visuales o vibratorios, los implantes cocleares o el efecto de la discapacidad en los ingresos.

Ante esta situación, Hernández Gil puso de manifiesto una serie de estrategias de actuación que favorecieran la situación de las mujeres madres sordas: garantizar una plena accesibilidad a la información, comunicación y servicios; incorporar la lengua de signos y subtitulado en campañas; eliminar las barreras sonoras, como la instalación de luces en salas de consulta en vez de llamadas por megafonía; así como asegurar la comprensión de los distintos textos y escritos.

La segunda charla, titulada “Análisis de la realidad monomarental y experiencias de apoyo”, denunciaba las dificultades a las que se enfrentaban las madres como única figura familiar.

El acceso al empleo, la inaccesible promoción laboral, así como el acceso a formaciones o a viviendas son algunos de los términos a los que Carmen Flores, presidenta de la Federación de Asociaciones de Madres Solteras, dedicó especial interés.

“Llevamos muchos años luchando por el reconocimiento de este tipo de familias, que ha recibido muchos obstáculos. Queremos crear un modelo familiar diferente”.

Para solventar estas situaciones, Flores explicaba que la ASMS lleva a cabo una serie de programas de orientación e información que enfoquen una mejora de la intervención social familiar, la vivienda, la atención a necesidades básicas, así como el fomento del empleo, formación, conciliación, ocio y participación.

“El objetivo de la asociación es la mejora del bienestar y la calidad de vida de las familias monomarentales, mediante el empoderamiento de las mujeres que las sustentan, para así lograr la plena inclusión social de sus integrantes”, añadió.

Por último, “Programa Preinfant de acompañamiento a la maternidad”, dirigido por Arantxa Díez, coordinadora de Preinfant Madrid, daba fin a la jornada.

“El programa está dirigido al acompañamiento de maternidades en situación de alta vulnerabilidad social”, explicaba.

Además, añadió que el fin último de este tipo de programas consiste en la prevención del maltrato infantil. “Potenciar y dar soporte a la madre protegiendo de este modo la salud física y mental del bebé, disminuyendo y eliminando aquellas situaciones de riesgo que se puedan dar a lo largo del embarazo y de los tres primeros años de vida”, señalaba.

Por ello, los objetivos que rigen el programa se basan en competencias marentales que visibilizan, incorporan y recuperan las habilidades y recursos necesarios para una crianza sana y responsable; la creación de un vínculo de apego seguro entre la madre y el bebé, reduciendo al máximo los indicadores de riesgo existentes; y, por último, crear una red de apoyo segura que impulse el empoderamiento y la autonomía de la madre.

Dando fin a la jornada, Ana Buñuel de las Heras, directora General de Familia e Infancia del Ayuntamiento de Madrid, pronunciaba un discurso que concluía el acto.

Foto: Archivo AmecoPress.

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