Fronteras difusas, víctimas invisibles
Barcelona, 02 jul. 15. AmecoPress/La Independent.- El pasado martes 30 de junio, la Fundació Surt ( http://www.surt.org/ ) ha presentado, en la Oficina de la Representación de la Comisión Europea en Barcelona, los resultados de la investigación “Fronteras difusas, víctimas invisibles. Aproximación a la trata de seres humanos con fines de explotación laboral en el servicio doméstico en España”.
Este estudio se enmarca en el proyecto “Combating Trafficking in Women for Labour Exploitation in Domestic Work” (http://ec.europa.eu/dgs/home-affairs/financing/fundings/security-and-safeguarding-liberties/prevention-of-and-fight-against-crime/index_en.htm ), financiado por el programa de Prevención y lucha contra el crimen de la Dirección general de Migración y Asuntos de Interior de la Comisión Europea, y realizado entre 2013 y 2015. El proyecto ha sido coordinado por la Universidad de Nicosia, (Chipre), con la colaboración del Instituto de estudios de género del Mediterráneo (Chipre); la Universidad Panteion (Grecia); el Centro de información para mujeres (Lituania) y la Fundación SURT. Fundación de Mujeres (Barcelona).
Se trata de un estudio cualitativo, realizado por Amanda Alexanian, Laura Sales Gutiérrez y Mar Camarasa i Casals, y en el cual han participado instituciones como la Defensora del Pueblo, la Inspección Territorial de Trabajo de Barcelona, el Fiscal Delegado de Extranjería de Cataluña, así como sindicatos y organizaciones especializadas en el tema.
Distribuido en dos partes, en la primera se analiza el marco político y jurídico español de lucha contra la trata de seres humanos y se valora la controvertida definición del fenómeno, así como su invisibilidad y falta de datos. La segunda parte analiza el sector del servicio doméstico en España y las políticas actuales en las difusas fronteras entre la trata y la explotación, así como las dificultades para detectar el delito. Cierra el trabajo un conjunto de recomendaciones para mejorar el tratamiento del fenómeno, la identificación y protección de las víctimas.
El director de la Representación de la Comisión Europea en Barcelona tomó la palabra para presentar al resto de la Mesa y reiterar la disposición de su Oficina para la celebración de actos relacionados con proyectos europeos.
Fina Rubio explicó los objetivos de Surt, la entidad que preside y que lucha contra la trata de explotación sexual y la trata con explotación en el hogar, en el sector doméstico. Así mismo, Surt trabaja para la inserción de las mujeres que han vivido esta situación.
Legislación y problema oculto
Intervención de Laura Salas Laura Salas quiso destacar que se trata de una investigación con incidencia política y realizada desde la perspectiva de género sobre el tráfico y las condiciones laborales de sus víctimas.
Por ello han dedicado una gran parte del trabajo a la investigación documental del sector domestico, así como a entrevistas con asociaciones, instituciones, fiscalía, policía, Mossos d’Esquadra y entidades relacionadas.
Los datos de Euroestat contabilizan entre 2010 y 2012 a 1.964 víctimas en España de tráfico para la explotación, en las distintas finalidades). Según la Memoria de la Fiscalía General del Estado en 2013 se abrieron 143 diligencias de formas de tráfico, de las cuales solo 10 lo fueron por finalidad de explotación laboral, 4 por mendicidad y el resto por explotación sexual.
Cree, Salas, que hay que avanzar mucho tanto con la sociedad civil como con las instituciones. Primordial es incluir esta especificidad de delito de tráfico en el artículo 177 bis de la Ley de 2010, en el “Protocolo de atención a las víctimas de 2011” y en las diferentes directivas y protocolos de UE. La legislación española de 2008 es exclusiva contra el tráfico con fines de explotación sexual.
Tras este trabajo, su opinión es que esta cuestión no es prioritaria ni para el Estado español ni a nivel catalán.
Análisis del sector del servicio doméstico
Los datos sobre trabajo doméstico de Euroestat señalan que el 17 por ciento de hogares españoles tienen a personas en el trabajo doméstico y en un 90 por ciento son mujeres.
Expuso Amanda Alexanian que en una primera aproximación de la investigación, resulta muy difícil encontrar un patrón común. Aunque si está claro que la mayor parte de trabajadoras domésticas provienen de Filipinas y Paraguay y que sus traficantes son de los mismos países, la mayoría de veces familiares.
Los elementos de coincidencia señalan que: la captación se realiza individualmente por compatriotas y de la misma familia; personas de nacionalidad española realizan por Internet ofertas con condiciones no reales que llevan a la esclavitud; hay agencias de colocación no autorizadas que realizan las mismas ofertas; y en ambos casos se ocupan del traslado de las mujeres, les retiran el pasaporte y vinculan a las víctimas con una deuda que va creciendo y por tanto muy difícil de pagar.
Algunas mujeres han denunciado a dichas agencias y es gracias a su denuncia que se conoce tal realidad. Explican que llegan con un trabajo con trabajo pactado que luego se transforma en condiciones indignas tanto sanitarias, de comida, horarios...
Por otro lado, el Real decreto de 2012 incluye a las trabajadoras domesticas en el régimen general de la SS pero carecen de derechos como el desempleo y mejoras en las condiciones laborales.
Explotación laboral oculta en los hogares. No hay conciencia social
A través de su estudio, quieren las investigadoras destacar la especial vulnerabilidad de la víctima, tanto legal, como el desconocimiento del idioma i en algunos casos de analfabetismo.
La totalidad de las mujeres entrevistadas han vivido una explotación laboral muy grave, sin contrato básico, con funciones sin definir, con sueldos muy bajos y sufriendo abusos en relación con la comida e higiene.
Otro aspecto es el de las “cadenas de abuso”, ya que muchas veces tras una situación de explotación sexual padecen otro tipo de abusos como es el caso que nos ocupa, la explotación laboral en el servicio doméstico.
Relacionados con esta explotación existen los “matrimonios serviles”, matrimonios por conveniencia que conllevan un trabajo forzoso doméstico y la violencia sexual.
Dimensión de género. Recomendaciones
Cabe señalar que la Agencia de Derechos Fundamentales de la Unión Europea, contempla la explotación forzosa, pero no se plantea la dimensión de género. Dimensión imprescindible para poder combatirla.
Parecería como si en la explotación privada no “se entra”. Ello es debido al límite difuso entre explotación y tráfico. Para combatirla sería necesaria la promulgación de una ley integral contra el tráfico y no sólo contra la explotación sexual. Incluir la explotación laboral severa en los supuestos de tráfico.
También es necesario: establecer redes incluyendo entidades que trabajan sobre el terreno y para la protección de las víctimas; un Plan específico contra la trata con explotación laboral con dotaciones para la Inspección de trabajo (por las dificultades en entrar en los hogares) para acabar con la impunidad de los explotadores.
Y por supuesto, piden las expertas, hay que poner esta explotación en la agenda de la Lucha contra las violencias hacia las mujeres.
En el transcurso del tiempo dedicado a las preguntas de los medios sobre las dificultades de informar sobre un estudio cualitativo y no cuantitativo, se argumentó que las dificultades de detección de esta explotación se pueden comparar con los inicios de la sensibilización contra la violencia machista. Porqué si bien es cierto que solamente hay 3 diligencias en curso de explotación laboral en el sector doméstico en España de las 10 de explotación laboral (el resto se hallan en agricultura y hostelería), es en parte porque no hay indicadores para poder afirmar que sea masivo o no.
Las autoras del estudio remarcaron su carácter cualitativo y que a pesar que no se puedan aún dar cifras, está claro que “una vulneración de los Derechos Humanos nunca es menor. Estas víctimas están muy invisibilizadas. Se trata de una situación muy oculta en algunos hogares, pero constituye una flagrante vulneración de los Derechos Humanos. Y que existe ahora en este siglo y en este país”.
Explicaron que en estos casos, por la problemática del tipo de captación (familiar o amistad), desarraigo y dificultades idiomáticas, no auto-identificación (quizás en el país de origen viven situaciones parecidas de explotación) etc. El procedimiento reactivo es, muchas veces, el inicio de la diligencia.
Así mismo, informaron, que las asociaciones especializadas en tráfico creen que hay más casos de, explotación laboral.
Fina Rubio, Presidenta de Surt, quiso remarcar la opinión se su entidad: “Se trata de un fenómeno que va más allá de los pocos casos. Lo que se ve es sólo la punta de un iceberg. Para la entidad es un fenómeno preocupante”.
También consideran las autoras, que el motivo fundamental de dicha vulneración se debe a la desigualdad entre mujeres y hombres, y por tanto las políticas de sensibilidad deben ir en este sentido.
Es necesario: avanzar en la detección de la captación, y el traslado con finalidad explotación. Conseguir que las víctimas estén más protegidas con un permiso de situación especial; que la legislación recoja trabajo forzoso y explotación laboral; y elaborar recomendaciones concretas para contratar mínimamente bien.
Fotos: Tona Gusy.
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Autonomías – Economía – Empleo y género – Mujeres emigrantes – Trata – Encuentros y Jornadas. 02 jul. 15. AmecoPress.
Documentos
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