España incumple sus compromisos y vulnera los derechos de víctimas de trata y personas refugiadas
Madrid, 09 jun. 16. AmecoPress. Save The Children ha presentado el informe ‘Infancias invisibles’ sobre tres grupos que sufren vulneración de derechos: menores extranjeros no acompañados, víctimas de trata y personas refugiadas. Los datos nos muestran un total de 30 millones de niñas y niños en situación de desplazamiento o refugio, convirtiéndose en una tendencia creciente más que en situaciones puntuales.
Menores extranjeros no acompañado (MENA), víctimas de trata y personas refugiadas son los tres grupos que Save The Children ha considerado para su informe Infancias Invisibles. A pesar de ser un número importantísimo, no aparecen en ningún acuerdo o discusión política o institucional. Entre la población menor, de 0 a 4 años, hay 7 millones de migrantes por motivo de guerra, violencia o persecución. El dato ha supuesto un aumento del 41 por ciento respecto al anterior. A Europa han llegado más de 400000. Sin embargo, las instituciones no tienen la voluntad política necesaria para hacer frente a este hecho.
“Para las instituciones, son primero migrantes, y luego menores”, cuenta Andrés Conde, Director General de Save The Children. El informe supone una exigencia a los líderes políticos para que este colectivo de menores figure en sus prioridades. “Tienen que ser visibles en una sociedad que les invisibiliza”, remarca Conde. El director habla de “una crisis con rostro infantil”. Los datos hablan de más de que a Europa han llegado más de 400000 menores. Otra cifra revela que 96000 MENA solicitan asilo. Además, un total de 10000 menores, según la Oficina Europa de Policía (Europol), está en paradero desconocido.
Todas las soluciones que se han tomado con respecto a las migraciones son, según los resultados, ineficaces. Muchas de ellas, incluso, están fuera de la legalidad, como el acuerdo con Turquía. Actualmente, hay 55000 personas bloqueadas en Grecia. “Los flujos migratorios no se paran, se reconducen. La decisión ha supuesto una disminución de llegadas a Grecia, pero han aumentado las personas que cruzan el Mediterráneo, siendo esta una ruta mucho más peligrosa”, alerta Conde. Según datos de la Europol, las tarifas de las rutas han aumentado porque la demanda también ha subido.
Sin cumplir los compromisos
Los países europeos están incumpliendo sus promesas. “Las personas refugiadas inmigrantes no pueden ser moneda de cambio”, advierte el Director General. Save The Children cree imprescindible invertir en los países de origen, pero también garantizar la protección a familias que piden asilo.
En España, se aceptó una acogida y reubicación a 18000 personas refugiadas. Sin embargo, de esa cantidad, solo han llegado 164, muchas de ellas en las últimas semanas. Almudena Escorial, de Save The Children, cuenta que se estima una llegada de “586 para final de mes, lo que supone únicamente un 3 por ciento del compromiso”. No solo eso, sino que en 2015, España recibió 14600 peticiones de asilo, de las cuales 5720 proceden de Siria.
Víctimas de trata con fines de explotación sexual
“Una de las mayores violaciones de los derechos humanos es la trata, considerada la esclavitud del siglo XXI”, comienza Escorial. El control proviene de hilos muy sutiles que hace que sea muy difícil de identificar. Los datos oficiales de la policía en España revelan una cifra imposible: 900 mujeres y 17 niñas son víctimas de trata. Las organizaciones especializadas, con datos más reales, estiman un total de 45000 mujeres y niñas explotadas. La mitad de ellas, además, aseguran que empezaron cuando aún eran menores. Esto es un “problema de voluntad política”, argumenta Escorial. Continúa afirmando que “aunque se identifiquen, no hay protección ni ayuda que ofrecer”. Al problema de la trata hay que sumar las hijas e hijos de las víctimas, utilizados por las mafias para controlar a sus madres.
Almudena Escorial nos revela la historia de Evelyn, una niña que vino en patera y, a pesar de las evidencias, no fue considerada víctima. Su llegada a España comenzó con un internamiento en un Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE). Tras esto, se trasladó a un centro de menores –no especializado en víctimas de trata-. “A la primera semana de estar ahí, desapareció”, cuenta Escorial, que imagina que continúa siendo víctima de la trata.
Menores extranjeros no acompañados
Este otro colectivo sufre vulneración, además por partida doble. Por un lado, no tienen derechos como menores porque, a pesar de tener un pasaporte válido, no tienen ningún tipo de tutela y están fuera del sistema de protección. Gran parte de este colectivo es sometido a pruebas de dudosa validez, en las que se afirma que son mayores. Pero como tal, tampoco tienen derechos: el pasaporte válido no es denunciado. Muchas de esas personas se encuentran con una mala situación que “necesita de protección; tienen derecho a ello”, afirma Escorial.
Desde Save The Children, trabajan con este colectivo de dos formas. En primer lugar, ofrecen espacios seguros, en el lugar en el que se encuentran, donde hay personas que se desplazan para conocerlos personalmente y acompañarlos en su proceso migratorio. Para menores que se encuentran en disposición judicial, también hay personas que diariamente los visitan: supone un apoyo para ellos, generando una relación de confianza, y recuerdan a las autoridades que la detención es ilegal.
Condiciones ínfimas
Los Centros de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) son lugares inadecuados para menores. Desde Save The Children, comenta Escorial, “pedimos que estos centros no sirvan de asilo para más de 10 días”. El CETI de Melilla no cumple las condiciones necesarias, por lo que habría que llevar a cabo dos medidas. En primer lugar, hablan de garantizar los derechos a los que ya están, mejorando las características. En segundo lugar, si no tiene las medidas necesarias, reubicarlos. “Lo primordial es evitar que estén en la calle”, argumenta Escorial.
Los sistemas de proyección tampoco están preparados para los colectivos con especial vulnerabilidad, como los MENA. Las personas de este colectivo no son identificadas como refugiadas. De esta forma, no reciben la atención psicológica necesaria, pues muchos centros actúan sin personal especializado. Los colectivos vulnerables tampoco tienen las herramientas necesarias para reintegrarse.
#PonteLasGafas
A pesar de la cantidad de datos negativos que Save The Children proporciona, Conde afirma que ya han contactado con partidos políticos de alcance nacional, y lo siguen haciendo constantemente. En la campaña electoral anterior no estuvo en el debate electoral, a pesar de que el tema de las personas refugiadas sí estuvo en el debate social. “Tenemos derecho a conocer la propuesta de los partidos políticos al respecto”, asegura el Director. La ayuda humanitaria no puede estar al servicio de una naturaleza política, “requiere un compromiso en base a las necesidades de la población”, reitera Conde. Desde Save The Children han enviado unas “gafas simbólicas” junto con el informe, mediante las que piden que “vean a estos colectivos de menores invisibles”, concluye Conde.
Fotos: AmecoPress
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1) A la izquierda, Andrés Conde, Director General de Save The Children. A la derecha, Almudena Escorial; 2) Imagen del informe Infancias invisibles sobre personas refugiadas; 3) Imagen del informe Infancias invisibles sobre victimas de trata
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Internacional - Derechos Humanos - Trata - Infancia - Mujeres inmigrantes - Cooperación; 09 de junio.16. AmecoPress