El éxito del feminismo en la intervención con mujeres drogodependientes
“Extrañándonos de lo normal” relata la experiencia de introducir la perspectiva de género
Madrid, 4 feb (10). AmecoPress. La Editorial Horas y Horas presenta el libro “Extrañándonos de lo normal: Reflexiones feministas para la intervención con mujeres drogodependientes”, escrito por la antropóloga y educadora social Patricia Martínez. En sus páginas relata su propia experiencia en la intervención directa con mujeres drogodependientes y destaca las particularidades derivadas de esta condición en contra de unos protocolos tradicionalmente androcéntricos.
Patricia Martínez pasó 10 años trabajando con grupos de personas drogodependientes, en pisos de convivencia y centros de acogida. Eran grupos mixtos, en los que ella y sus compañeros y compañeras aplicaban los protocolos a los que estaban acostumbrados. En una ocasión, en uno de estos pisos, sólo había mujeres. Entonces, aplicaron las medidas acostumbradas, pero se dieron cuenta de que fallaban. Las mujeres abandonaban, recaían y no volvían a los talleres.
Así es cómo esta educadora social empezó a preguntarse en qué estaban fallando, y su hallazgo fue que los protocolos utilizados no tenían en cuenta la realidad de las mujeres, estaban pensados para hombres. “Conté con el libro de Marcela Lagarde, Claves Feministas para la Autoestima de las Mujeres. Fue mi manual de trabajo. Esta obra que ahora presento es hija de él. Apliqué lo aprendido a los talleres sólo con mujeres, y conseguimos resultados”.
Lo que descubrió fue algo a la par evidente e invisible. “Las mujeres tenían particularidades a tener en cuenta. Cómo tratar la sexualidad, o el hecho de tener hijos. Ser mujer y drogodependiente tiene un doble estigma social. Sienten que rompen con todos los roles sociales, que no son buenas madres, y que se lo reprochan. Entonces vuelven a caer”. Las mujeres drogodependientes sufren de diferente manera su situación, y necesitan apoyos diferentes. “También en hecho de utilizar su cuerpo para conseguir una dosis. A quien se mira mal es a ella, no a él”. Así que se trabajó mucho más en interpretar y romper con esos roles sociales, y en la autoestima. “Salían mucho más fuertes, empoderadas. Algunas se dieron cuenta así de que eran feministas”.
“En los talleres ellas cuentan todo lo que les pasa. Es muy duro. Se plantea el problema de no tener una vida “normal”, que gira en torno a lo laboral, y en la que la pareja es entendida como éxito. Hay otros modelos igualmente válidos, por eso el libro se titula Estrañándonos de lo Normal”, explica la autora.
Martínez no tuvo nada fácil aplicar los cambios que consideró necesarios en la intervención con mujeres. Allí donde trabajara, no le permitían salirse de lo establecido, y ha tenido que ponerlo en práctica en diferentes talleres en su tiempo libre. Entre las novedades que tanto cuesta aceptar en las instituciones está la de que las mujeres en tratamiento se hagan amigas. “Una de las reglas en cualquier taller es que no se creen vínculos entre las personas, que no queden fuera, porque eso puede animarles, cuando están juntos, a recaer. En los talleres con mujeres vimos que se hacían amigas, era inevitable. Se contaban cosas muy íntimas, y se apoyaban. Pero también descubrimos que las mujeres no se reúnen en determinadas situaciones, que quedan en la esfera más privada, y ésta era una de ellas: no recaían por estar juntas”.
Fotos: archivo AmecoPress
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Pie de foto: 1) Patricia Martínez; 2) La autora durante la presentación
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Cultura - Libros - Situación Social de las Mujeres - Feminismo; 4 febrero (10), AmecoPress