Desmantelada una red que obligaba a brasileñas a prostituirse en España bajo amenaza de muerte
En total 25 personas han sido detenidas por la Policía Nacional en una investigación que comenzó a raíz de una denuncia de dos de las víctimas que consiguieron escapar. Las mujeres eran interceptadas en Brasil y las traían engañadas a España, donde las obligaban a ejercer la prostitución bajo amenazas.
La presunta mujer que se encargaba de interceptar e introducir a las víctimas ha sido detenida en Natal (Brasil), lugar de origen de las brasileñas, acusada de un delito de tráfico internacional de personas. Del resto de personas detenidas, 14 pertenecían a la organización, que ha quedado desmantelada.
La investigación comenzó el pasado mes de mayo cuando dos mujeres brasileñas huyeron de un club de alterne de Gerona donde estaban recluidas y obligadas a prostituirse bajo pena de muerte y que acudieron al consulado de Brasil en Barcelona para pedir ayuda.
Paralelamente, la Brigada Central de Redes de Inmigración, de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras, informó de que la Policía Federal de Río Grande do Norte (Brasil) había iniciado una investigación por tráfico de personas para explotarlas sexualmente. A lo agentes brasileños les contaba que los gastos de los traslados habían sido asumidos por empresariados españoles, que ha resultado ser los propietarios de los dos clubes de alterne.
Trabajo de la banda
La mujer detenida era la encargada de contactar con las víctimas y proporcionarles todo lo necesario para trasladarse a España, así como los datos de las personas con las que debían ponerse en contacto. Una vez en nuestro país, los responsables de la organización retenían sus pasaportes e indicaban a las brasileñas que habían contraído una deuda con ellos que ascendía a 2.500 euros, cantidad que estaban obligadas a pagar prostituyéndose en un club de alterne.
Entre las condiciones de trabajo en el club figuraban normas que hacían prácticamente imposible llegar a saldar la deuda: se les imponían castigos y multas de 300 euros por incumplir las normas, además de pagar su alojamiento y manutención. Debían pagar 300 euros por un día de descanso y 150 euros si terminaban el trabajo antes de las 8 de la mañana. El primer servicio del día era para el club y el segundo para pagar la deuda contraída por venir a España. Al tercero empezaban a descontar los gastos de hospedaje.
A las personas detenidas se les imputan delitos contra los derechos humanos de los extranjeros relativos a la prostitución, contra los derechos de los trabajadores, detención ilegal, amenazas, tenencia ilícita de armas y aplicación de la Ley de Extranjería. Se han efectuado registros en 5 domicilios, 4 españoles y uno en la ciudad de Natal, y se han intervenido armas, dinero y documentación, así como material informático.
Fotos: Ministerio del Interior.
Pie de foto: Material requisado.
Internacional- Derechos Humanos; 30 octubre (08)
AmecoPress