Brecha salarial, factor de quiebra democrática
Madrid, 20 feb. 18. AmecoPress. El pasado 13 de febrero, el sindicato Comisiones Obreras presentó su informe anual sobre la desigualdad laboral existente entre hombres y mujeres. Por su parte, Elena Blasco Martin, Secretaria Confederal de Mujeres e Igualdad, ha dado su visión ante una situación cada vez más preocupante en la sociedad española.
La ministra de Empleo, Fátima Báñez, afirmaba el 14 de febrero ante el Congreso de los Diputados que “la brecha salarial se situaba en mínimos históricos”, con los datos de la Encuesta de Estructura Salarial de 2011. Elena Blasco ha respondido a la ministra pidiendo que "no mienta ni manipule".
Las dirigentes de Comisiones Obreras, a través de un informe presentado, señalaban la brecha salarial como un factor de quiebra democrática que se basa en cuatro ejes: desigualdad, precariedad, temporalidad y parcialidad. Elena Blasco afirma “se trata de una injusticia estructural que empobrece la vida de las mujeres y les depara un futuro de pobreza. Es un factor de quiebra y descrédito democrático”.
Este documento muestra como la mitad de las mujeres gana menos de 16.825 euros al año. En todos los grupos ocupacionales, la ganancia media de los hombres es superior al de las mujeres. Las ocupaciones que cuentan con menores salarios continúan estando muy feminizadas. “La brecha salarial es la consecuencia económica de una cadena de discriminaciones hacia las mujeres que comienza antes de que lleguen al empleo y continúa en su empresa” afirma.
Cerca de la mitad de la brecha salarial mensual en la nómina entre mujeres y hombres se concentra en los complementos salariales, un componente menor de la ganancia mensual, porque el salario base es claramente el componente más importante del salario, que explica el 54% de la brecha salarial. Además, de los 2 millones de mujeres desempleadas, solo un millón cobra algún tipo de prestación. Las diferencias salariales llegan a ser de 8.121 euros en el grupo de edad de 55 años.
Las mujeres continúan padeciendo una fuerte segregación ocupacional y sectorial, además de una mayor tasa de trabajo a tiempo parcial y diferencia salarial. Blasco considera “la situación socio- laboral de las mujeres en España tiene su origen en la cultura patriarcal que obstaculiza la inserción en el empleo de las mujeres en el mercado laboral”. Se trata de una cultura que actúa sobre los factores socioculturales y determina la desigualdad salarial con un escaso número de mujeres en el mercado de trabajo.
La Ley para la Igualdad Efectiva de mujeres y hombres, en 2007, reiteraba las bases legales para consolidar una igualdad real en el ámbito salarial y laboral. Sin embargo, la brecha aún sigue viva y vigente en la sociedad española. Para poder eliminarla, Blasco considera imprescindible activar un proceso de diálogo social tripartito dirigido a poner en marcha las reformas legales precisas que garanticen la igualdad retributiva entre hombres y mujeres.
Para finalizar, la secretaria confederal considera que “son necesarias actualizaciones legales para la creación, desarrollo y aplicación eficaz de una Ley de Igualdad Retributiva que englobe de manera más amplia y al mismo tiempo más adecuada y eficiente al conjunto de las desigualdades y brechas laborales entre mujeres y hombres”.
Foto archivo AmecoPress
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Estado español - Economía - Comunicado - Empleo y género - Brecha salarial - Legislación y género; 20 feb. 18. AmecoPress