Jueves 18 de octubre de 2007
La asociación El Defensor del Paciente ha informado que el Juzgado de 1ª Instancia número 9 de Santa Cruz de Tenerife ha emitido sentencia, en la que se condena a la entidad Corporación Dermoestética y a uno de sus doctores, a indemnizar con 30.000 euros a una paciente como consecuencia de las secuelas que padece tras una intervención de cirugía estética.
La paciente se sometió a una dermolipectomía abdominal, y al día siguiente recibió el alta y salió del hospital, pero a los tres días de estar en su casa tuvo que ingresar en urgencias por problemas de asfixia y supuración de la herida por donde le habían quitado el drenaje, yendo cada vez a peor, hasta el punto de quedarle abierta la cicatriz con infección y originándose carne necrosada.
La Sentencia entiende “que se infringió en cierta medida el deber de información médico, pues el consentimiento obtenido para la operación no fue fruto de una completa y personalizada información” además de que “el resultado conseguido no es el que cualquier mujer en circunstancias análogas perseguiría antes de someterse a las intervenciones quirúrgicas”.
El Defensor del Paciente no está de acuerdo con la sentencia puesto que, en su opinión, no se ajusta con las secuelas que padece la afectada, y, añade que “aunque no hay dinero en el mundo que subsane lo que es padecer una negligencia médica, nuevamente queda demostrado que resulta muy barato cometer un error médico”.
Sociedad – Salud y género – 18 octubre, 07 (AmecoPress)