“Una muerte es una tragedia, un millón de muertes una estadística”
En la clausura de la campaña “La salud en el milenio: una asignatura pendiente” se ha denunciado con datos concretos, que se está muy lejos de llegar a conseguir una mínima parte de los objetivos del Milenio en materia de salud. Mª
A lo largo de los dos años de esta campaña que han desarrollado Farmaceuticos Mundi y Medicus Mundi en Cataluña, se han realizado jornadas, conferencias, cine, y exposiciones. La coordinadora, anunció también que aunque se hubiera hecho acto de clausura, la campaña sigue adelante: “En los próximos meses tenemos que presentar las conclusiones y el manifiesto de la campaña a los responsables de los diferentes partidos de la Comisión de Cooperación del Parlamento de Catalunya”.
En esta campaña, la concepción de la salud se inscribe en una forma de ver mundo globalmente y de forma solidaria y, según Garcia, el punto de partida es “la consideración de que la salud humana como un derecho, no como un privilegio. Todos somos corresponsables de las desigualdades internacionales y podemos hacer algo para paliarlas”. Para la coordinadora, es fundamental un cambio de mentalidad social: “Tendríamos que mentalizarnos que una vida en el sur es igual a una vida en el norte, y acabar con la idea de que ‘una muerte es una tragedia, un millón de muertes, una estadística. No hay vidas que valgan mas que las otras” aseguró.
Mujeres y niños son las principales víctimas
Desde la perspectiva de género, Garcia destaca que la campaña ha defendido la salud como una concepción integral, que incluye de manera interrelacional los aspectos somáticos, la función social, la identidad sexual, las vivencias internas, las emociones y las condiciones materiales y ambientales. “Es fundamental considerar la salud de las mujeres no reduciéndola a su aspecto reproductivo” explicó García.
Pero las cifras hablan por si solas, y en este aspecto de salud reproductiva, tampoco se han cumplido los objetivos del Milenio, ni en la mejora de la salud materna, en prevención o cuidados de embarazos y partos. Aún no se han conseguido los objetivos básicos de universalización de los métodos anticonceptivos, ni tampoco se ha podido retardar la edad del primer embarazo. La situación sanitaria de las mujeres en los países pobres sigue siendo muy precaria. Son las principales víctimas de las carencias, asegura la coordinadora de la campaña.
Entre las actividades que se destacaron en este acto de clausura se subrayó la participación en las jornadas y charlas de personas expertas de ámbito nacional o internacional, tanto de las administraciones como de las organizaciones que trabajan en cooperación al desarrollo (ONGD) del sur y norte, de organismos internacionales y de laboratorios farmacéuticos, que han favorecido una visión global de la problemática, así como reconocer algunas iniciativas que se están desarrollando y que contribuyen a alcanzar los objetivos del Milenio (ODM).
Las conclusiones de la campaña fueron leídas en la cena de clausura por dos miembros del Consejo Asesor de la campaña, Vicenç Cararach, profesor de Obstetricia y Ginecología de
Las cifras de la vergüenza
Cada año mueren más de 11 millones de niños y niñas menores de 5 años, cuyas muertes se podrían haber evitado solo con prevención y tratamiento. La mayoría de los casos están relacionados con la malnutrición, y la infección del VIH/SIDA. Hay que tener en cuenta que cada año mueren 5 millones de personas por esta enfermedad. Todavía hay más de dos mil millones de personas que no tienen acceso a los medicamentos básicos. Según los organizadores de la campaña, “la ayuda en salud en temas de cooperación internacional está muy lejos de llegar al 20%, que establecieron los expertos como urgente, para ayudar la atención primaria en salud de los países en vías de desarrollo”. Las principales enfermedades a controlar siguen siendo malaria, sida y tuberculosis.
El tema del acceso a los medicamentos y la denuncia del papel de las multinacionales en el negocio de medicinas básicas, fue el objetivo de otra de las jornadas “técnicas” que se realizaron dentro de esta campaña. “Es necesario garantizar el acceso universal a los medicamentos. Es un derecho humano básico. Para eso hay que exigir mayor transparencia del mercado farmacéutico, que incluya información sobre ensayos clínicos, ventas a los gobiernos productos sanitarios, excluyendo la investigación local, precios asequibles y tratados comerciales controlados”, explicaba un miembro de la organización de esa jornada.
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Fotos: AmecoPress
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Autonomías – Salud y género – 6 noviembre, 07 (AmecoPress)