“Nuestra democracia será plena cuando hombres y mujeres tengan los mismos derechos”

Rosa María Peris Cervera comenzó su trayectoria política en su tierra natal, Valencia, región de la que fue diputada nacional en el Congreso de los Diputados hasta el año 2004, cuando fue nombrada directora del Instituto de la Mujer. Licenciada en Derecho por la Universidad de Valencia, concibe el feminismo como una forma de entender el mundo que apuesta por la igualdad de las personas, y hace suya la frase “pretender que una mujer no sea feminista es lo mismo que pretender que un rey no sea monárquico.” Considera que “apostar por la igualdad es seña de identidad” de una sociedad avanzada y nuestra democracia será plena cuando hombres y mujeres tengan los mismos derechos y oportunidades.

Durante esta legislatura se han producido cambios en la estructura del Instituto Mujer (IM) ¿Cómo funciona ahora?

Cuando llegué en 2004 al IM lo encontré bastante devaluado, con un personal desmotivado y desmoralizado, y con las asociaciones de mujeres manifestándose en la calle contra la directora anterior. Este es el legado que me dejó el Partido Popular. Siempre he dicho que ésta es la casa de las mujeres y que a ellas les pertenece, porque fueron las que más pelearon por su creación en el año 83. Durante estos cuatro años, he intentado recomponer puentes con las organizaciones de mujeres y también con las comunidades autónomas, porque cuando yo llegué, la mitad de las directoras de organismos regionales de igualdad no venían al Instituto.

¿Hay buena sintonía con las directoras de los institutos de la Mujer de las comunidades autónomas gobernadas por el PP?

Hoy todas vienen a debatir los temas de igualdad. Las del PP, como mínimo asisten, y eso significa normalidad democrática, algo que es muy importante en un organismo como éste, que necesita cooperación. Después de cuatro años, hemos sacado al IM de la periferia y hemos colocado los temas de igualdad en el centro de la agenda política. Éste es para mí el logro más importante de esta legislatura, y ha sido posible porque ha habido una confluencia de voluntad política para que esto se hiciera.

¿Qué novedades ha introducido el IM?

Pienso en los ejes de actuación y en la cooperación internacional. Algunos programas que se venían haciendo los hemos mantenido pero los hemos dotado de contenido, de feminismo y de avances hacia la igualdad real que en años anteriores habían perdido. Hemos recompuesto los puentes con América Latina y hemos seguido haciendo programas de cooperación con mayor dotación presupuestaria. Hemos hecho una apuesta por el empleo de la mujeres creando Soyempresaria.com y también por las nuevas tecnologías, porque las mujeres debemos hacer un esfuerzo para incorporarnos activamente a la sociedad de la información porque es el futuro, y si no lo hacemos, será un motivo más para la discriminación de las mujeres. Hemos hecho una apuesta muy importante por el empleo, el autoempleo, el empresariado femenino y también el trabajo de las mujeres extranjeras porque tenemos una inmigración mayor de mujeres y no podemos seguir tratándolas con los cánones masculinos.

También hay cambios en la lucha contra los estereotipos de mujeres que transmiten los medios…

Hemos hecho un esfuerzo por visibilizar nuestra cruzada contra la publicidad sexista, lucha en la que cada vez nos sentimos más acompañadas y estoy segura de que va a ser una de las líneas claves de futuro del IM: Servir como valedor de la defensa de la imagen de las mujeres.

Hay que denunciar los mensajes sexistas, aunque provengan de un académico de la RAE

¿Qué se puede hacer cuándo académicos como Arturo Pérez Reverte y Javier Marías utilizan lenguaje y conceptos sexistas para referirse a las mujeres?

Cuando leo algunas cosas que escriben creo que están intentando obtener notoriedad a base de tratar de ridiculizar a las mujeres. No les pienso dar el gustazo de que obtengan notoriedad por hacer algo tan vil. Lo que podemos hacer es lo que ya realizamos; por ejemplo, acabamos de celebrar un congreso con periodistas para hablar de la igualdad en el tratamiento de la información en los medios públicos. Vamos poniendo buenas prácticas sobre la mesa y estamos demostrando que a través de la información se hace daño a las mujeres de modo sexista, y que frente a esto, hay otra manera de hacer información que es veraz y respetuosa con la imagen de las mujeres.

Hemos creado el Consejo Asesor de la Imagen de la Mujer donde tenemos la representación de los medios de comunicación y de las principales agencias de publicidad, sentadas en una Comisión donde queremos encontrar mecanismos para que hagan su trabajo sin una utilización inadecuada ni de la imagen de la mujer y sin estereotipos de género. La otra vía que nos queda es seguir denunciando públicamente aquello que nos parezca sexista, venga de donde venga y lo diga quien lo diga, aunque se un académico de la Real Academia Española.

Las comunicaciones oficiales también utilizan un lenguaje sexista y las estadísticas oficiales no suelen aparecer desglosadas por género.

En estos años hemos ido avanzando en las estadísticas desagregadas por sexo y hemos aprobado una ley que obliga a que se haga así. Todas, desde el Instituto Nacional de Estadística, empleo o justicia tienen que desagregar los datos. Hay muchas estadísticas que ya lo están pero cuando nos dirigimos a ellas, no buscamos los datos por género, por tanto, el esfuerzo debe ser doble y hay que analizar los datos desagregados por sexo y publicarlos también.

¿Qué papel tiene el Instituto en el desarrollo de la Ley de Igualdad?

Tiene un papel crucial en la puesta en marcha de la Ley de Igualdad y estamos trabajando ya en ello. Hay algunas partes de la ley que son competencias del IM, por ejemplo, nos mandata informar y asesorar a todas las personas que sean víctimas de discriminación. Hemos elaborado el Plan Estratégico de Igualdad de oportunidades con la Secretaría de Igualdad y ya está en su última fase. La Ley nos decía que había que fomentar los postgrados de género y acabamos de sacar una convocatoria para incentivar las universidades a que lo hagan, porque necesitamos que nuestras chicas y chicos estudien con la perspectiva de género y puedan asumir lo que supone la igualdad de oportunidades y aprender una nueva mirada, porque serán los futuros trabajadores de las empresas.

La paridad es una realidad en la política española pero está muy lejos de llegar a la universidad ¿Cómo se puede acabar con este techo de cristal?

Evidentemente tienen una asignatura pendiente… y la tienen suspendida. Algunas profesoras de universidad comentan que no saben si en la universidad hay un techo de cristal o un suelo de cemento que nos impide despegar. La universidad no se ha adaptado todavía a una presencia equilibrada, pero estoy convencida de que ahí la LOU va a ayudar mucho.

En el día a día de la política ¿la relación entre las mujeres y los hombres es realmente igualitaria?

Que las mujeres accedan al poder político es una cuestión de derecho y eso es lo que recoge la ley de igualdad al modificar la ley electoral, que ninguna lista tenga una presencia de mujeres u hombres superior al 60% o inferior al 40%. Es cierto que muchas veces la sociedad mira a las políticas intentando ver dónde se han equivocado para, a partir de ahí, tirar hacia abajo de todas. Las mujeres estamos forzando entrar en un modelo, y lo estamos forzando porque vivimos en un sistema que por sí mismo no movería nada.

¿Que piensa del uso del término ‘feminista’ con tono peyorativo?

Estamos en un momento en el que tenemos que volver a reivindicar el valor de la palabra feminismo. Muchas veces oímos la palabra feminismo en contraposición al machismo cuando nada tiene que ver una cosa con la otra. El feminismo es una ideología y una manera de entender la vida que plantea que hombres y mujeres somos iguales y tenemos que tener las mismas oportunidades, y no le termino yo de ver los grandes riesgos a esa declaración.

Nadie ejerce la prostitución por voluntad propia

Dentro del feminismo también hay tensiones, una de ellas provocada por el tema de la prostitución…

El movimiento feminista es plural y diverso y en su seno caben posiciones diferentes, pero todas, siempre que se defiendan con argumentos, son respetables. Las posiciones distintas no tienen porqué fracturar el movimiento de mujeres porque lo importante es que esté unido. En relación a la posición del Gobierno con la prostitución, hemos valorado que es tan complejo el fenómeno, que querer abordarlo todo de una vez es imposible. Lo que más nos preocupa, y en lo que hay un enorme consenso también dentro del movimiento asociativo de mujeres, es la trata de mujeres con fines de explotación sexual.

El Gobierno está trabajando en un Plan de lucha contra la trata de seres humanos con fines de explotación sexual que tiene muchas patas. Necesitamos medidas policiales, de política exterior y de cooperación en los países de origen, y medidas sociales en nuestro país. Hay un porcentaje muy importante de mujeres que hoy están ejerciendo la prostitución que lo son porque son víctimas de la trata, y si somos capaces de abordar y enfrentarnos al fenómeno de la trata con cierto éxito, habremos desarticulado una parte muy importante del fenómeno en nuestro país.

¿Y las prostitutas que lo hacen de forma voluntaria?

Un grupo importante de mujeres nos puede decir que no son víctimas de trata sino que al venir a España se han encontrado en una situación socio-económica imposible, y a través de la prostitución se ganan la vida. Lo mejor que podemos hacer con ellas es una buena política social, para que puedan acceder al mercado del trabajo, a la formación… porque están ejerciendo la prostitución porque no han encontrado otra salida. Según los datos que manejamos, alrededor del 10% de las mujeres que ejercen la prostitución en nuestro país son españolas, hace diez años eran el 90%. En nuestro país ha cambiado la situación social y económica, y las españolas ahora encuentran otras oportunidades y pueden dedicarse a encontrar trabajo y a hacer otro tipo de vida, porque estoy convencida de que nadie ejerce la prostitución por voluntad propia.

No tienen impedimento para ejercer la prostitución, pueden darse de alta en la Seguridad Social porque nuestro sistema lo permite, aunque no como trabajadoras del sexo, y por tanto, tienen reconocido un derecho social, y no estoy dispuesta a que una minoría marque la orientación legislativa de todo el colectivo. Planteamos que hay estratos diferentes que requieren soluciones diferentes. Lo que para un grupo reducido puede ser una conquista, que se les reconozca como trabajadoras del sexo –que no estamos por esa labor-, para otras puede suponer una perpetuación en esta situación, cuando si tienen otras vías, saldrán de la prostitución.

Cada vez hay más mujeres que llegan a altos cargos en la esfera política internacional…

Es muy importante que haya referentes, y desde luego, el hecho de que Ángela Merkel sea la canciller alemana, que en Chile esté Michelle Bachelet como presidenta, Ellen Johnson en Liberia, y también las candidaturas femeninas en países como Argentina y Estados Unidos, con Cristina kischner y Hillary Clinton, contribuye a visibilizar a las mujeres en altos cargos, porque cada mujer puede decidir a qué dedica su vida.

¿Cree que en España estamos preparados tener una presidenta del Gobierno?

Yo creo que sí, sin ningún tipo de duda.

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Política-liderazgo-entrevista; 19 octubre (07) AmecoPress