La asociación de Juezas reclama al CGPJ que cubra con mujeres los tres puestos vacantes del Tribunal Supremo
Madrid. 16 de enero. 18. AmecoPress. Por decisión del Consejo General del Poder Judicial, próximamente serán cubiertas tres vacantes en el Tribunal Supremo: una plaza en la Sala de lo Contencioso administrativa, otra en la Sala de lo Social y la tercera en la Sala de lo Penal.
La Comisión Permanente del Consejo General del Poder Judicial ha realizado una primera selección de 6 personas para estas salas. Las candidaturas por género elegidas de momento son las siguientes:
- Sala de lo Penal: 4 hombres y 2 mujeres, frente a 7 mujeres y 20 hombres presentados.
- Sala de lo Social: 4 hombres, de nuevo, y 2 mujeres, de un total de 13 hombres y 6 mujeres.
- Sala de lo Contencioso - Administrativo: 5 hombres y 1 mujer, de un total de 4 mujeres y 16 hombres.
En la Sala Contencioso - Administrativo dejaron fuera a una de las candidatas con más méritos acumulados, María Asunción Salvo Tambo, presidenta de la Sección Cuarta de la Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional. Por lo tanto, un número no determinado de vocales están considerando presentarla en el Pleno como la séptima candidata, visto su brillante currículum.
La Asociación de Mujeres Juezas de España denuncia que muchas de las candidatas cuentan con méritos curriculares, antigüedad en la carrera judicial, y experiencia en el orden jurisdiccional respectivo. Sin embargo, los favoritos antes de realizar esta selección ya eran dos hombres para las Salas de lo Penal y de lo Contencioso-Administrativo, que finalmente han sido expuestos en las candidaturas elegidas, Fernando Román y Javier Hernández.
Representación escasa de las mujeres en los altos cargos
Nuestra legislación marca unos estándares de representación mínima de cada sexo en todo tipo de altos cargos, de un 40%. En cambio, la representación femenina en todas estas Salas está muy por debajo de esa norma. En la Sala de lo Penal solo una mujer forma parte frente a 13 hombres (7,1% de representación femenina), 4 mujeres están actualmente integradas en la Sala Contencioso-Administrativo frente a 31 hombres (11,4% de representación), y otras 4 mujeres forman parte de la Sala de lo Social frente a 8 hombres (33,3% de representación femenina).
Esta situación de notable desigualdad en el Tribunal Supremo no está correspondida con la real estructura y composición de la Judicatura, que está integrada por un 52’7% de mujeres de acuerdo con el último informe sobre estructura demográfica de la Carrera.
El número de mujeres presentadas a altos cargos es muy reducido, y es debido a un problema de conciliación familiar y laboral. Gloria Poyatos, presidenta de AMJE (Asociación de Mujeres Juezas de España) señala, en entrevista con AmecoPress, que “alrededor del 98% de los permisos y excedencias que se piden en la carrera judicial los piden las juezas”. Por lo que las mujeres todavía siguen asumiendo una doble presencia: la profesional y la familiar.
En cuanto a los métodos de selección, Gloria Poyatos indica: “hay que cambiar las condiciones curriculares de acceso a la cúpula de la justicia, hay que implementar la perspectiva de género e integrar los valores femeninos que han sido despreciados históricamente”. Por lo que propone que sean establecidos dos elementos para esta valoración: la igualdad y la inteligencia emocional. La presidenta critica “no puede ser que para desempeñar una profesión tan importante como es hacer justicia, que tiene un impacto humano, no se exijan requerimientos que muestren la inteligencia emocional de las personas, mucho más allá de los méritos curriculares”. Por lo tanto, habría que tener en cuenta como mérito curricular el tiempo dedicado a los cuidados familiares, y así promover la corresponsabilidad.
Estándares de igualdad sin penalización
Poyatos señala que “no hay una legislación que obligue al Consejo a establecer la paridad en su cúpula judicial”, es decir, no existe ningún tipo de castigo si no se cumple el 40% citado anteriormente. A lo que añade: “hay recomendaciones para que exista equidad por parte de la ley de igualdad y organismos internacionales”. Asimismo, Naciones Unidas en su último informe sobre la cuestión de la discriminación contra la mujer en España (publicado el 17 de junio de 2015) denunciaba que “el número real de mujeres en los niveles más altos de la judicatura sigue siendo sumamente bajo” y recomendaba al Estado español que aplicara “medidas especiales de carácter temporal para lograr un equilibrio de género en los niveles más altos de la Judicatura”.
A pesar de todas las renovaciones producidas en los últimos ocho años en el Tribunal Supremo, el número de mujeres no ha cambiado desde 2010. Actualmente solo hay 11 mujeres magistradas de un total de 77 integrantes. Este mismo patrón está reproducido en otros altos puestos judiciales: de 17 presidencias de Tribunales Superiores de Justicia, sólo 1 tiene nombre de mujer, y de las 50 presidencias de Audiencias Provinciales solo 8 son femeninas.
Desde la AMJE reivindican “una participación igualitaria y justa de las mujeres en todas las esferas sociales, políticas, culturales o judiciales y especialmente en las altas Jerarquías de la Judicatura desde donde se toman las decisiones de mayor trascendencia judicial". Además, la asociación desde la Comisión de Igualdad del CGPJ han propuesto que exista una valoración curricular al punto dedicado a los cuidados familiares, tanto de juezas como de jueces. Y critican que esta desigualdad "es una anomalía que redunda en la calidad de la justicia porque no representa la mirada completa de una sociedad formada por mujeres y hombres".
Foto Archivo AmecoPress tomada de AMJE.
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Estado Español - Empleo - Empleo y género - Conciliación - Legislación - Legislación y género; Madrid. 16 de enero. 18. AmecoPress.