El Plan B será feminista o no será
Madrid, 18 febrero. 16. AmecoPress. Madrid acoge este fin de semana las jornadas contra la austeridad y por la construcción de una nueva Europa. O lo que es lo mismo, un debate para articular lo que ya se conoce como Plan B. Durante los días 19, 20 y 21 de febrero desfilarán por el Matadero de la capital el exministro de Finanzas griego Yanis Varoufakis, su homólogo francés Oskar Lafontaine, y cerca de 80 ponentes –muchas mujeres- de distintos países de Europa. También feministas.
El Plan B es una iniciativa que exige una alternativa a la austeridad y defiende una Europa democrática, y propone crear “una red de pensamiento” a partir de la Conferencia Europea que se celebrará este fin de semana. No se trata de crear un partido europeo, sino de crear un espacio de confluencia capaz de generar una “agenda común” que pueda combatir las políticas de austeridad y democratizar radicalmente las instituciones europeas.
Dentro del Programa, compuesto por foros, talleres y plenarias con diferentes ejes temáticos, encontramos un espacio con el título ‘El Plan B será feminista o no será’, formado por dos talleres: uno sobre ‘Feminismo, procesos constituyentes y derechos de las mujeres’ (en el que participarán Justa Montero, activista feminista, Beatriz Gimeno, diputada de la Asamblea de Madrid y Angela O`Hagan, activista feminista escocesa) y otro con el nombre de ‘Crisis, ajuste y alternativas feministas’ (con la intervención de Antonella Picchio, activista feminista italiana, la portuguesa Lidia Fernándes, de la Marcha Mundial de las Mujeres y Sandra Ezquerra, economista y activista)
Justa Montero explica que para ella un proceso constituyente implica sobre todo, la dinamización y movilización social hacia un horizonte de cambio sustancial. No se trata de pormenorizar en este momento la letra de los cambios legislativos que queremos, aunque sean necesarios. Tampoco de instalar una agenda concreta, que el movimiento feminista ya tiene y desde la cual presiona para influir en la agenda política. Sino de pensar y debatir sobre nuestras aspiraciones y ver cómo desde ellas es posible articular un proceso de movilización social que protagonice ese cambio, que después se expresará en leyes y en otros elementos concretos. Pero es ese cambio social el que permitirá y hará factible el cambio legislativo, institucional y político y no al revés. “Nuestra Constitución garantiza el derecho a la vivienda, al trabajo, ¿y?”, advierte Justa.
Desde el punto de vista de la activista, el movimiento feminista tiene que ver cómo articular ese proceso de movilización, que hoy no está, y cómo entrelazarse con otros movimientos y luchas sociales. Y claro que tiene que repensar aspectos concretos y el hacer cotidiano, pero “los movimientos sociales necesitan ideales, utopías, horizontes” y sus propuestas han de ser “valientes, atrevidas, avanzadas”.
Por su parte, Beatriz Gimeno escribía recientemente: Lo que nos estamos jugando en este momento es la posición que va a jugar el feminismo en la batalla por la superación de esta crisis. ¿Vamos a luchar por cambiar la actual correlación de fuerzas económicas y políticas considerando que el eje de igualdad de género es fundamental en la construcción de una nueva sociedad, o vamos a salir de esta desde el androcentrismo tradicional que ignora nuestras luchas e incluso nuestras vidas? ¿Vamos a incluir en ese Plan B, que apoyo, la denuncia de la dominación masculina y los modos específicos de dominación neoliberal aplicados a las mujeres? ¿Vamos a denunciar entre todos y todas el imaginario patriarcal que oculta la desigualdad estructural de género o quizá la redefinición de las jerarquías de género que se está pretendiendo hacer va a contemplar la desigualdad como una diferencia individual y no sistémica? ¿Va la resistencia antineoliberal a ser capaz de hacer una denuncia radical de la estructural del androcentrismo neoliberal…o no? Porque de la respuesta a esas preguntas va a depender que el Plan B que proponemos sea una salida justa u otra traición más a las mujeres que hemos resistido, luchado, mantenido a las familias, que hemos salido a las calles, puesto el cuerpo ante un desahucio, cuidado de los enfermos y dependientes abandonados por el estado, trabajado en condiciones de explotación. Necesitamos un Plan B para Europa que tenga en cuenta que las mujeres somos Europa”.
Llamamiento
La presentación de Plan B en Madrid tiene lugar poco después de que el exministro de Finanzas griego diera formalmente el pistoletazo de salida a la iniciativa DiEM 25 (Democracy in Europa Movement 2025), en Berlín, y se lanzara el llamamiento ‘Plan B, contra la austeridad, por una Europa democrática’, que ha sido firmado por más de 10.000 personas, activistas, políticas e intelectuales. Entre las personas firmantes, además de Varoufakis, se encuentran Ada Colau, José María González, la ex - presidenta del Parlamento griego Zoe Konstantopoulou, la eurodiputada de Podemos, Lola Sánchez, Alberto Garzón, Pablo Echenique, Xavier Domènech, Pedro Santisteve, Beatriz Gimeno, el conocido director de cine Ken Loach, el portavoz de CADTM Eric Toussaint, Yayo Herrero de Ecologistas en Acción, el filósofo Noam Chomsky, y los catedráticos de economía Juan Torres y Costas Lapavitsas.
“La actual UE está gobernada de facto por una tecnocracia al servicio de los intereses de una pequeña, pero poderosa, minoría de poderes económicos y financieros”, denuncia el llamamiento, que se puede consultar en diferentes idiomas.
“Por estos motivos, queremos generar un espacio de confluencia en el que todas las personas, movimientos y organizaciones que nos oponemos al modelo actual de Unión Europea y consensuar una agenda común de objetivos, proyectos y acciones, con el fin último de romper con el régimen de austeridad de la UE y democratizar radicalmente las Instituciones Europeas, poniéndolas al servicio de la ciudadanía” termina.
Las 1.400 entradas para el evento se agotaron en apenas unas horas.
Foto: Archivo Amecopress
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UE – Política – Feminismos – Movimiento feminista – Encuentros y jornadas; 18 febrero. 16. AmecoPress