Sólo IU se compromete a despenalizar el aborto y aprobar una ley de plazos en el debate a siete
Los siete partidos con representación parlamentaria se enfrentaron anoche en el debate a siete que se celebró en TVE. La subida de las pensiones, especialmente las de viudedad, y la Ley de Dependencia protagonizaron el bloque dedicado a política social. Sólo Izquierda Unida habló del aborto: la candidata por Madrid, Montserrat Muñoz, se comprometió a despenalizarlo y a aprobar una Ley de plazos.
Cada representante político contó con un minuto de intervención para presentarse ante la audiencia: los candidatos de Coalición Canaria (CC), Fernando Banyolas, y de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Joan Ridao, se refirieron en sus discursos a la violencia de género y mostraron su solidaridad con las víctimas.
“Los partidos políticos tenemos mucho trabajo que hacer en el futuro para erradicar la violencia de género”, afirmó Banyolas. Por su parte, Ridao, que también recordó su apoyo al Gobierno durante la pasada legislatura para sacar adelante leyes como la de Igualdad, aseguró que la violencia machista “es un problema que tenemos que abordar entre todos”.
Fue ya en el bloque dedicado a políticas sociales cuando los demás partidos abordaron la violencia de género. El candidato del PP, Esteban González Pons, aseveró que la Ley Integral contra la violencia de género “es un fracaso”, aunque aseguró que no era momento para “hacer reproches”. Pons propuso un pacto social en contra de la violencia de género “en el que estemos todos implicados”, y habló de crear planes de seguridad personalizados para las víctimas. “Hay que cambiar la educación y la cultura”, manifestó.
La candidata de IU destacó que esta ha sido una legislatura “de avances sociales” con la aprobación de leyes como la de igualdad, dependencia, matrimonios homosexuales o violencia de género. Sobre esta última declaró que es “un instrumento, pero que será más eficaz si se le pone más dinero y coordinación administrativa de la que creemos que se ha puesto”. Muñoz recordó que algunas comunidades autónomas han devuelto dinero que el Estado les concedió para luchar contra este tipo de violencia.
El candidato del PSOE, Ramón Jáuregui, contestó a PP e IU para reconocer que una ley “no es un instrumento que lo arregle todo” y afirmar que hay un problema “de subcultura que hay que arreglar entre todos”. Sin embargo, no explicó ninguna de las propuestas de su partido. Sí señaló que el Gobierno del PSOE ha sido “el más avanzado del mundo en políticas de igualdad” y puso de relieve la creación del “cuarto pilar del Estado de bienestar: la Ley de Dependencia”.
Aborto
La candidata de IU, Montserrat Muñoz, fue la única que habló del aborto y reivindicó “que se despenalice de una vez”. “No reconocer el derecho al aborto es tanto como no reconocernos el derecho a decidir sobre nuestro propio cuerpo”. Muñoz denunció que el PSOE no cumplió su programa electoral de 2004, en el que estaba contemplada una nueva regulación del aborto. En su intervención final, la candidata insistió en la necesidad de regular el derecho al aborto “con una ley de plazos”
Dependencia y pensiones
Fueron la Ley de Dependencia y la subida de las pensiones las que ocuparon la mayoría de las intervenciones sobre política social. Prácticamente todos los partidos coincidieron en señalar la importancia de esta ley, aunque criticaron su dotación económica y la falta de coordinación con las comunidades autónomas. No obstante, CiU y PNV mostraron su disconformidad con la norma porque “invade competencias autonómicas”.
“Este avance se ha hecho a costa de las competencias autonómicas”, declaró el candidato del PNV, José Erkoreka, que criticó también “la publicidad inflada” de la que dice ha ido acompañada esta ley. El representante de CiU, Jordi Jané, llegó a decir que es “una ley de escaparate” y que las competentes para llevarlas a cabo con las comunidades. El candidato del PSOE recordó que esta norma “establece y reconoce un derecho” y que “medio millón de mujeres que cuidan a mayores recibirán una prestación y cotizarán a la Seguridad Social”.
También todos los partidos mostraron consenso en la necesidad de subir las pensiones, especialmente las de viudedad: ninguna pensión por debajo de los 700 euros es el compromiso generalizado. “Las viudas han cuidado a sus hijos, a sus maridos, a sus familiares y les estamos dando la pensión más baja”, reivindicó el candidato del PP.
Por su parte, Jáuregui quiso poner de relieve que el Gobierno socialista ha aumentado las ayudas a la maternidad, ha reconocido el permiso de paternidad y ha reconocido la pensión de viudedad también para las parejas de hecho.
Política- Elecciones 9-M- Política y género- 29 febrero (08) AmecoPress