La nueva estrategia de cooperación en salud incorpora al concepto salud sexual y reproductiva los derechos de las mujeres
Prosalus, Medicusmundi y Médicos del Mundo presentaron hoy el análisis de la cooperación al desarrollo española en al ámbito de la salud, basado en los datos del 2006. Las ONG destacaron el aumento de la ayuda oficial en un 39%, aunque afirmaron que aún se sigue lejos de lo necesario para cumplir los objetivos del milenio.
“La salud se reconoce como uno de los derechos fundamentales del ser humano y está muy relacionada con el desarrollo de los pueblos”. De este modo encuadró Susana Fernández, de Médicos del Mundo, la presentación de un informe que, si bien muestra importantes avances, también vuelve a hacer evidente la falta de equidad y el aumento de la brecha tanto en esperanza de vida como en la calidad de la misma, entre países ricos y pobres.
Los datos fueron analizados con referencia al ámbito mundial y el europeo, incorporando una visión de proceso, en la que se destacó una considerable mejora en la cooperación al desarrollo española en el ámbito de la salud en cuanto a planificación y coherencia, aunque se advirtió de la necesidad de aumentar la inversión en este sector y la coordinación entre sus actores, para poder cumplir los Objetivos del Milenio en materia de salud.
El sistema de salud español es una referencia
En este sentido, Carlota Merchán, de Prosalus, afirmó que “el informe destaca que, si bien el porcentaje de AOD total destinado a salud en 2006 se situó en un 8,88% (un 1,6% más que en 2005), esta cifra está muy lejos aún del 20% que las organizaciones recomendamos para poder alcanzar los compromisos internacionales". En concreto,
Según Carlota, “aunque se advierte un esfuerzo en la planificación y en una visión más estratégica de las inversiones, España tiene aún mucho que aportar, como por ejemplo su sistema de salud, ya que es muy avanzado y ni siquiera los países desarrollados cuentan con él”.
Por su parte, Carlos Mediano, hizo hincapié en la “necesidad de diseñar una estrategia común en Europa, en el campo de la cooperación para la salud, que hoy no existe, así como convertir a la salud en un eje específico de cooperación”. Las ONG advirtieron también de la necesidad de avanzar en claridad en las inversiones, sin que se mezclen distintos intereses, y de trabajar con tiempos más largos que permitan a los países receptores de la ayuda saber que cuentan con ella y planificar mejor.
Derechos de las mujeres
En cuanto a la salud sexual y reproductiva, Prosalus, Medicus Mundi y Médicos del Mundo destacan que “si durante muchos años la cooperación oficial estatal concebía la salud de la mujer exclusivamente como salud reproductiva, enfocada sólo a la maternidad, la nueva estrategia incorpora al concepto salud sexual y reproductiva los derechos de la mujer”. Esto, sin embargo, contrasta con el hecho de que “sólo el 15,17% de
Para Carlota, “el avance de las mujeres y de la salud de las mujeres es un tema que necesitamos abordar entre todos. Es cierto que una de las prioridades de la cooperación es el tema de género, y de hecho, está contemplado como un eje específico, pero a veces, se vuelca la responsabilidad del avance en educación, en salud, en los problemas de desnutrición infantil por ejemplo, sobre las mujeres específicamente, y esto es una carga muy pesada”, concluyó.
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Fotos: AmecoPress
Pie de foto: de derecha a izquierda, Susana Fernández, José María Medina, Carlota Merchán y Carlos Mediano.
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Sociedad – Salud reproductiva – 20 febrero, 08 (AmecoPress)